El Sindicato de Ingenieros & Profesionales viene a público reforzar el llamado a un diálogo basado en los datos que la empresa entrega a sus accionistas y al público.
El trabajo de transparencia que caracteriza la gestión de SIEP en sus distintas instancias, hace necesario transparentar para la comunidad de Enel Generación algunas informaciones relevantes sobre los resultados financieros de la empresa en este proceso de Negociación Colectiva.
La medición más reconocida de la gestión operacional de una empresa es el concepto EBITDA. En castellano, Utilidades antes de Impuestos, Intereses, Depreciación y Amortización, o Resultado Bruto de Explotación.
En la página 15 de la Memoria Anual 2019 de ENEL Generación, bajo el capítulo titulado: “Principales indicadores financieros y de operación”, el EBITDA de los años 2017 al 2019, alcanzó cifras que representaron el equivalente al 35,6%, al 38,3% y al 40,9% de los ingresos de explotación de cada uno de esos años, respectivamente. Con montos que alcanzaron los 581,1 mil millones de pesos, los 582,2 mil millones de pesos y los 669,7 mil millones de pesos, respectivamente.
Se trata montos e índices de una rentabilidad operacional bruta absolutamente extraordinaria, excepcional, sólo comparable con las de las 3 mayores operaciones de la gran minería del cobre en Chile.
Para entender el mérito de la gestión que ha permitido este nivel excepcional de buenos resultados, es importante señalar que:
- La disminución de los ingresos ordinarios junto con la disminución de los costos de materias primas y consumibles han determinado que hacia 2019 tenga un aumento del margen de contribución del orden de los 803,4 mil millones de pesos.
- Paralelamente, los gastos operacionales directos (dentro de los que se incluyen los gastos de personal) cayeron en un promedio anual de un -5,1%.
- Como consecuencia final, el EBITDA evolucionó al alza, en los montos que ya hemos señalado, siendo el de 2019 superior en un 15,2% al de 2017.
- Todo ello en un contexto en el que la dotación de personal de ENEL Generación ha disminuido año tras año; al mismo tiempo que la energía generada aumentó sostenidamente. Como resultado, la productividad física por trabajador pasó de 20,13 GWh/trabajador en 2017, a 22,65 GWh/trabajador en 2018 y a 24.72 GWh/trabajador en 2019. Lo anterior da un aumento de la productividad y efectividad de los trabajadores de ENEL de un 23% en estos años.
En los primeros 9 meses de 2020, el EBITDA es de 373,2 billones de pesos, equivalente al 33,3% de los ingresos de explotación. Una excelente rentabilidad operacional bruta aún en tiempos en que la pandemia ha afectado el normal desempeño de muchas actividades.
El determinante de este EBITDA fue el aumento de las materias primas y consumibles, en particular, las mayores compras de energía física en el mercado spot como resultado de una menor generación hidroeléctrica explicada por las condiciones hidrológicas que afectan al país. A lo anterior se suma un menor despacho térmico asociado en gran medida a una menor generación en base a carbón.
En todo caso, los ingresos por actividades ordinarias tuvieron sólo una leve disminución, derivado de las menores ventas de gas, mientras las ventas de energía se mantuvieron creciendo en un 2,7%.
Los gastos operacionales directos, por otra parte, se redujeron en un -3,3%, siendo los gastos de personal los que acusaron una mayor baja, de un 5,1% respecto del mismo período del año anterior.
En síntesis: ENEL Generación Chile exhibe en este período de 3 años y nueve meses niveles de EBITDA absolutamente extraordinarios y excepcionales. Todo ello en medio de un entorno económico nacional y mundial complejo, que la empresa ha sabido sortear exitosamente, haciendo los ajustes de gestión que han sido necesarios.
Invitamos a todos nuestros colegas a revisar las novedades de este proceso por medio de las redes sociales.